La presencia de uno o más sellos negros en un producto procesado indica que éste presenta niveles superiores a los límites establecidos por el Ministerio de Salud, en relación a sodio, azúcares, grasas saturadas o calorías.
Todos factores que están asociados a la obesidad y enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, infartos e incluso cáncer.
Por esta razón es importante enseñarles a los niños a leer las etiquetas y explicarles que los productos con sellos deben ser consumidos con moderación.