La manzana es una fruta muy completa. Aporta potasio, fósforo, fibra, calcio, sodio, magnesio, hidratos de carbono, hierro y vitaminas A, B, C y E.
Un 85% de su composición es agua, convirtiéndose en un alimento muy refrescante e hidratante. Además, por su contenido en azúcares naturales (fructosa, glucosa y sacarosa) es de fácil asimilación para el organismo.
Tiene propiedades antiinflamatorias del aparato digestivo y un gran poder diurético, incluso anticatarral e hipotensor. Es conocida su acción antioxidante, pues contribuye a reducir el efecto de los radicales libres en el organismo.
Una de las propiedades más destacadas es su acción como reguladora intestinal. Por su contenido en fibra es útil como laxante para tratar el estreñimiento si se consume cruda y con piel, mientras que pelada, rallada y cocida tiene efecto astringente. Por eso, está especialmente indicada para casos de diarrea.
La manzana contiene, además, pectina, una fibra soluble que funciona como absorbente de toxinas y mejora las funciones del sistema digestivo, ayudando a purificar el organismo.
Gracias a los flavonoides es beneficiosa para el corazón, y por su contenido en hidratos de carbono aporta energía.
Hay que limpiar bien la manzana antes de consumirla y prepararla en el momento de consumirla para evitar la oxidación. Si no se consume la manzana entera, se puede guardar el resto para otro momento sumergiéndolo en una parte de zumo de limón por tres partes de agua.
Exquisitas recetas para que tus hijos coman manzana.
Manzanas asadas
Ingredientes
6 manzanas gordas
40 grs. de mantequilla
6 cucharadas de miel.
Cómo se hace
Lava y seca las manzanas. Colócalas en una fuente para el horno, previamente untada con un poco de mantequilla. Unta cada manzana con un poco de mantequilla y una cucharada de miel. Mete la fuente en el horno y mantenla allí media hora a fuego medio. Sirve las manzanas recién salidas del horno.
Compota de manzana crujiente
Ingredientes
3 manzanas, 1 cucharadita de azúcar moreno, 50 ml agua, 200 ml yogur, 2 cucharaditas miel y 6 cucharadas de cereales de desayuno.
Cómo se hace
Pela y trocea las manzanas. Pon un cazo al fuego con el agua, el azúcar y los trozos de manzana. Deja cocer a fuego bajo durante 10 minutos, retira del fuego y reserva hasta que enfríe. Mientras tanto, mezcla el yogur con la miel hasta conseguir una crema homogénea. Rellena los vasos con una capa de cereales de desayuno, otra de yogur y otra con la compota de manzana.